martes, 26 de octubre de 2010

La escritura más provechosa...


La escritura puede funcionar como un mecanismo de ofensa. Escribo hijo de puta, basura, mierda, sorete, escoria, parásito y estoy ofendiendo. También puede funcionar como una forma de canalizar la ira y desenmascarar lo oculto. Escribo corrupto, denuncia, legal, incorrecto, injusto, desleal, deshonesto, y lo estoy haciendo.
El oficio de escribir nos puede conducir por múltiples caminos. Queda en nosotros elegir el que consideremos más apropiado. Por mi parte, veo con buenos ojos la denuncia como una forma respetuosa de “ofensa sin ofender”. Es decir, arrojándole en la cara al responsable nuestra verdad del asunto, aunque tal vez no sea correcta. Esa, a mi parecer, es la escritura más provechosa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario